domingo, 12 de mayo de 2013

Nosofobia

NOSOFOBIA O ENFERMAR 

También llamada nosemafobia, "del griego nosema, enfermedad y fobia , miedo" tomado del diccionario lexis 22.


Es el miedo injustificado a enfermar o convertirse en paciente.

Pero no es  el miedo que se presenta ante una persona enferma o la visita a un hospital o centro de salud; el temor casi siempre esta presente en cada momento ya que es un terror de contraer alguna enfermedad en cualquier momento. Sobretodo a las enfermedades peligrosas como el cáncer , enfermedades de transmisión sexual.Los que sufren esta fobia tienen ataques de pánico incluso frente a un simple dolor de dientes o un calambre y sufren estrés por creer que se van a enfermar.

La nosofobia puede iniciar desde los años de la infancia inducidas a los niños por parte de los padres o personas que cuidan de ellos, y son personas sobreprotectoras o que exageran demasiado en sus cuidados sobretodo frente a los temas de la salud.

imagen tomada de: http://www.psicoglobalia.com/la-sobreproteccion-de-nuestros-hijos-y-sus-efectos/


Quienes padecen de este trastorno muchas veces son mal llamados “hipocondríacos”. La Hipocondría es un temor en el cual la persona está convencida de sufrir determinadas enfermedades. La nosofobia ha sido pensada a menudo como un caso restringido de hipocondría, ya que la persona tiene temor a la enfermedad, pero no está convencido de sufrirla.

No obstante, empíricamente la diferencia entre la auténtica hipocondría y la nosofobia parece quedar claramente establecida. El miedo hipocondríaco de la enfermedad se diferencia del miedo nosofóbico en los aspectos siguientes:



1. Mientras que los hipocondríacos no consideran que su miedo sea excesivo ni irracional, los nosofóbicos sí.


2. Los pacientes hipocondríacos no temen contraer una enfermedad en el futuro (como sí lo temen los nosofóbicos) sino de ya haberla contraído, tenerla en la actualidad y no haber sido diagnosticados.


3. Los pacientes hipocondríacos no evitan a los médicos y hospitales ni presentan respuestas de ansiedad inmediata al encuentro con los mismos.





De cualquier manera, distintos estudios factoriales han hallado que existen dos dimensiones desiguales en la hipocondría, la nosofobia por un lado y la convicción de enfermedad por otra. Existen evidencias de que las terapias conductuales de exposición serían más eficaces en los pacientes fóbicos mientras que los tratamientos que se centran en cambios cognitivos funcionarían mejor con aquellos pacientes que están convencidos de padecer la enfermedad.










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